Buscando información sobre la situación y el grado de implantación de la FP dual en España me he topado con este excelente artículo publicado por GlobalNET Solutions en su blog corporativo. Lo transcribo literalmente, pues me parece un gran trabajo de síntesis y no me parece ético extraer su contenido sin reconocer su autoría y ubicación. Enhorabuena y gracias a GlobalNET Solutios y a su autora @mariarubiom
El 8 de noviembre de 2012 es la fecha del
Real Decreto por el que se regula la Formación Profesional Dual. Según la define esta misma reglamentación, es “
el conjunto de acciones e iniciativas formativas que tienen por objeto la cualificación profesional de las personas, combinando los procesos de enseñanza y aprendizaje en la empresa y en el centro de formación”. También en ella se explica el objetivo de la norma: “
se pretende que la empresa y el centro de formación profesional estrechen sus vínculos, aúnen esfuerzos y favorezcan una mayor inserción del alumnado en el mundo laboral durante el periodo de formación”.
Tras el Real Decreto, en enero de 2014, el
Ministerio de Empleo y Seguridad Social publicó una orden, fechada en diciembre de 2013, que venía a completarlo y que establecía la idea de que “
en un alto porcentaje, el joven trabajador continúe vinculado a la empresa con un contrato indefinido tras la finalización del contrato para la formación y el aprendizaje”.
En realidad, se trata de volver la vista a una tradición, la del aprendiz, pero con el respaldo de una enseñanza teórica sólida, o así se pretende. Afecta a jóvenes de entre 16 y 25 años, lo que amplía, con mucho, la edad de esa antigua figura y viene a recoger todo el periodo de formación que va desde el fin de la obligatoria, hasta la salida al mundo laboral, al igual que ocurre con un universitario.
Sin embargo, los trabajadores/alumnos no pueden estar más de tres años con la FP Dual, por lo que la inclusión del tramo entre los 20 y los 25 años podría tomarse, por parte de las empresas, como un aval para “contratar” mano de obra barata, si no se articulan las herramientas necesarias para evitarlo.
Catorce fueron las comunidades autónomas que, en un primer momento, adoptaron y adaptaron las leyes, encabezadas por la Comunidad de Madrid, que fue la pionera. En la actualidad, todas las autonomías han incluido este tipo de formación que proviene de países como Alemania, donde está dando, por lo visto, excelentes resultados, o Dinamarca.
La FP Dual está aún en mantillas en España, aunque parece que las cifras respaldan la gran apuesta gubernamental para disminuir el paro juvenil. Durante los dos años transcurridos desde su puesta en marcha, según las cifras manejadas por la
Subdirección General de Orientación y Formación Profesional, con datos entregados por las diferentes comunidades autónomas, se aprecia un incremento de un 200% en el número de alumnos en el curso 2013-2014 respecto al anterior, pasando de 4.292 a 9.555, sobre todo en Cataluña, Castilla-La Mancha y la C. Valenciana.
También han crecido las empresas interesadas en más de un 300%, de 513 a 1.570, en especial en las comunidades de Canarias, Murcia y, de nuevo, Castilla-La Mancha y Valencia. Por último, los centros de formación donde se imparte la FP dual pasaron de 172 a 375, un 218% más, encabezados otra vez por Castilla-La Mancha, Euskadi, Cataluña y la C. Valenciana.
El informe deja más datos de interés, como que las familias profesionales más activas en la FP Dual son las relacionadas con la industria (energía, textil, maquinaria, metal, automóvil, química, etc.), que suponen el 70% de los proyectos, mientras que al sector de servicios (turismo, banca, transporte,…), corresponde un porcentaje del 29%. Además, la formación es, en gran parte, de grado superior (un 72%).
A pesar de tan buenas cifras, en este bienio se han apreciado diferentes obstáculos para su asentamiento correcto y definitivo, y, de hecho, solo un 1% de los jóvenes españoles deciden cursar esta modalidad de FP.
En este sentido, el IESE Business Scholl Universidad de Navarra realizó el pasado diciembre un estudio titulado “
La formación profesional dual como reto nacional”, en el que se destacaban
cuatro retos principales: la falta de compromiso empresarial, el poco peso de la industria en el sistema productivo (recordemos que España es un país de servicios), el estigma que la FP tiene en el país y la tendencia de cursar estudios universitarios o de FP superior. Desde luego, las cifras que hemos visto antes avalan las conclusiones del estudio.
Ante esta situación, el instituto universitario ofrece un decálogo de buenas prácticas que incluimos a continuación:
Simplificar los trámites administrativos;
Facilitar a las empresas la tarea formativa;
Respaldar socialmente la figura del aprendiz;
Reforzar en la empresa la figura del tutor;
Promover un sello de calidad de la formación profesional dual;
Regular la formación online;
Incentivar a los centros educativos y a las empresas;
Implicar a todos los agentes de la cadena de valor;
Ofrecer un marco jurídico que aporte seguridad;
Promover foros de intercambio de opinión entre los agentes implicados.
Como decíamos, la FP Dual aún está en mantillas por lo que es difícil hacer una previsión de futuro. Sin embargo, la apuesta de la comunidad educativa, del gobierno y de las empresas parece firme. Lo que está claro es la necesidad de que los alumnos salgan con la suficiente capacitación para ejercer en el mundo laboral, lo que se conseguirá, sin duda, gracias a la formación dual adecuada, tanto a nivel de conocimientos teóricos como prácticos en las empresas. Para ello, es necesario que
los centros educativos y las organizaciones, se dejenasesorar por profesionales que les ayuden a encaminarse hacia dicho objetivo.
¿Cómo, según tu opinión, se desarrollará esta modalidad educativa? Gracias por comentar y por compartir.
